miércoles, 23 de noviembre de 2016

Capítulo 26: Las lecciones aprendidas de la historia

Capítulo 26: Las lecciones aprendidas de la historia


-Alteza, ¿qué significa esto? Antes Carter pensaba que el príncipe sólo actuaba arbitrariamente y solo, pero ahora pensaba que se había vuelto caprichoso.

En la teoría de cómo entrenar a un soldado, el caballero principal no pensó que había una manera más profesional que la suya propia. Su familia tenía un conjunto completo de métodos de entrenamiento tradicionales, de la edad de diez a quince años, sólo habría cinco años para desarrollar el cuerpo y dominar todo tipo de armas usadas por un soldado. Si fueran entrenados por más de cinco años, entonces se convertirían en un soldado superior, conocido como un Caballero - por supuesto, los aprendices no pueden tener un fondo civil.

Mirando al grupo de imbéciles delante de él, que sólo tenía pensamientos de comer huevos en su mente, Carter se enojó! Después de todo... ¡los huevos son caros!

Roland le habló directamente a la oreja: -“Mira bien y recuerda todo. Este es el tipo de entrenamiento que debe realizarse en los próximos días. Por supuesto, algunos detalles cambiarán. Voy a enumerarlos para usted en un papel. "

En la era de las armas blancas, ¿había dos o tres meses de entrenamiento suficiente para entrenar a un grupo de buenos soldados? Roland no pensó en esta pregunta y tampoco necesitó a uno de esos guerreros espartanos vestidos con calzoncillos que podían desgarrar animales salvajes con sus propias manos. La fuerza de combate individual de la gente de Roland puede no ser fuerte, pero deben ser bien disciplinados y ejecutar cada orden sin falta.

La mayor parte del tiempo la fuerza del grupo es más importante que la fuerza individual. Por lo tanto, necesitaba que formaran rápidamente una unidad. Para lograr esta tarea rápidamente y pasar a la formación militar para mejorar la situación actual era la mejor opción. Por su experiencia personal [El Servicio Militar es obligatorio en China], sabía que un mes sería suficiente para formar un grupo de personas de todo el país en una unidad fuerte cohesión. Independientemente del proceso, el objetivo era claro.

Y cuando este grupo de personas aprendió a seguir órdenes, Roland podría comenzar a implementar el siguiente paso de su plan.

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En última instancia, Van'er no consiguió un segundo huevo para comer.

Esta vez, tuvieron que mantener el doble de la cantidad de tiempo de la ronda anterior hasta que las piernas de alguien se debilitaron y ya no se pudo perseverar.

Justo en este momento, el cuarto príncipe permitió que todos descansaran y luego ordenó a sus asistentes que sirvieran el almuerzo. Esto transfirió con éxito la ira del debilucho a la anticipación por comer. En este punto, Van'er empezó a sospechar que Su Alteza probablemente nunca había pensado en permitirles obtener un segundo huevo.

El almuerzo estaba lleno en cuatro enormes barriles, que eran llevados por carruajes fuera de la ciudad. Además de la comida, los carruajes también contenían muchos tazones y cucharas.

Van'er se lamió los labios, listo para saltar sobre los carruajes. Pero él, junto con todos los demás, fue detenido por el caballero jefe, que estaba frente a ellos.

Su Alteza Real el Príncipe ordenó a todos que se alinearan en cuatro filas y se acercaran uno a uno para recoger sus cubiertos. Quien perturbara la orden se vería obligado a retroceder hasta el final de la línea y dejar su comida en último lugar.

Las filas eran muy ruidosas con todo el mundo comprimido todo por conseguir una buena posición. Van'er tenía muy buena suerte, estaba en la vanguardia de la fila más externa. Por supuesto, algunas personas expresaron su intenso resentimiento. Así que dentro de las filas, los sonidos de las personas que luchaban con palabras y movimientos podían ser escuchados. Pronto los caballeros y varios guardias se precipitaron entre la multitud escogiendo a los alborotadores para ser enviados al fondo de la línea.

Tonto, pensó Van'er cuando vio al hombre a la vanguardia de los alborotadores. Lo reconoció. Él era el mejor combatiente de la calle en la ciudad, también conocido como "Insane Fist". Por lo general, confiaba en la fuerza bruta para provocar problemas en todas partes.

Ahora, solamente las manos desnudas contra caballeros y guardias armados con espadas, dio de una imagen lamentable. ¡Miren su pobre apariencia ahora!

Sentía que ya había captado la preferencia de Su Alteza.

Eso iba a ser una unidad.

De pie derecho, uno al lado del otro, el equipo tuvo que formar líneas. Todo el mundo tenía que hacer cola para conseguir algo de comer, siempre manteniendo el orden, nunca saliendo... Van'er había escuchado previamente de un empresario bien informado que algunos de la nobleza tenía un pasatiempo extraño. Y eso era que todo tenía que arreglarse en orden, todo el que se destacaba sería obligado a volver a su lugar.

En opinión de Van'er, este tipo de persona simplemente se aburría y no tenía nada mejor que hacer. Así que incluso deliberadamente encontrarían algún problema para estar ocupados.

No esperaba que Su Alteza Real fuera una persona así.

Cuando se abrieron las tapas de los barriles, Van'er pudo oler el fuerte aroma de la comida.

Cuando el aroma se dispersó, casi se perdió a la tentación. La muchedumbre también se puso inquieta, pero al mismo tiempo un rugido para callarse vino del caballero principal. Van'er pensó que probablemente tendrían que alinearse de nuevo.

Efectivamente, el cuarto príncipe ordena todo el mundo a obtener a sus cubiertos primero y luego hacer la línea de nuevo para recibir la comida.

A pesar de eso, todos ellos tuvieron que tragar su saliva y retener sus estómagos que estaban gruñendo. Dado el ejemplo de Insider Fist, todos se quedaron quietos, esperando pacientemente la comida.

Los barriles estaban llenos de gachas de trigo caliente. Para la sorpresa de Van'er, encontró que el gachas ¡incluso habían unas sacudidas! Mientras que era sólo un pedazo pequeño de sacudidas, ¡incluso entonces todavía era carne! Después de obtener su parte de las gachas, también obtuvo su deseo - su huevo.

Van'er casi devoró su comida. Parecía que no había comido durante días, mientras lamía el fondo de su tazón una y otra vez después de terminar su comida. Ni siquiera tuvo tiempo de morder el huevo, ya que se lo tragó todo, enviándolo directamente al estómago. Como comía demasiado rápido y no tenía cuidado, su lengua desarrolló ampollas.

Después de poner el tazón vacío, Van'er dio una palmadita en el vientre y felizmente echó a andar. No había disfrutado de una comida tan deliciosa en mucho tiempo. E incluso más increíble era que en realidad sentía una sensación de saciedad. Comer avena de trigo con pan negro, incluso si se compara con el cielo, no podría ser mejor. Si pudiera comer así todos los días, incluso luchar en las líneas de frente contra las bestias demoníacas valdría la pena, ¿verdad?

Después de la cena, todos tuvieron un largo período de tiempo para descansar. Durante este tiempo todo el mundo fue traído de vuelta dentro de las murallas de la ciudad, caminando todo el camino hasta el campamento de la patrulla del pueblo. Un hombre corpulento con el rango de un Ranger salió y comenzó a enseñarles a montar tiendas de campaña.

Van'er lo conocía; no había nadie en la ciudad que no conociera a Iron Axe. Su excelente habilidad en el tiro con arco dejó incluso al cazador más experimentado de la ciudad pensando que estaba en el apogeo de la perfección. Espera un minuto, ¿desde cuándo trabajó Iron Axe para el cuarto príncipe? Parecía que lo había visto permanecer al lado de los caballeros antes. Van'er frunció el ceño. Al final, ¿qué estaba planeando Su Alteza Real? Él era anteriormente un ciudadano de la nación de la arena.

-¿De verdad quieres nombrar a un hombre de la Nación de la Arena como capitán? Carter sostenía la misma pregunta: -No pertenece a Graycastle. Ni siquiera es una persona de nuestro continente".

-Las brujas tampoco pertenecen a Graycastle -interrumpió Roland-, pero todas pertenecen a Border Town. Además, ¿no ves lo que está pasando?

-Pero, Su Alteza...

-No te preocupes -dijo Roland al hombro del caballero-, en Border Town, no nos importa el origen de ninguna persona. Mientras no haya violación de la ley del Reino, todos ellos serán mis queridos súbditos. Realmente no tienes que preocuparte. También puede elegir dos capitanes. De todos modos, en el futuro, vamos a ampliar el número de equipos, por lo que no sería malo para cultivar algunos talentos prometedores ahora. ¡Oh, es cierto! Ya he escrito el reglamento de entrenamiento. Comparado con la gente de la nación de la arena, pienso que usted debe estar más preocupado por esto. "

Carter sacó el pergamino de las manos de Roland. Barrió a través de su contenido desde el principio hasta el final, de repente se sintió mareado. El contenido del entrenamiento era simplemente inaudito - por ejemplo, en la tarde todos tuvieron que correr las vueltas alrededor de la Border Town después de comer el almuerzo hasta el sol. Las regulaciones incluso hicieron hincapié en que todo el mundo tenía que hacer esto y que se les permitía ayudarse mutuamente en el camino. Si perseveraban sin renunciar hasta el final, todos recibirían un huevo adicional para la cena. Otro ejemplo fue cuando por la noche los silbatos de lobo fueron volados, todos tuvieron que informar inmediatamente. Con este tipo de ejercicios de entrenamiento, tenía miedo de que la mayoría de ellos se lanzaba de un lado al otro lado durante la noche.

Si los primeros ejercicios ya eran difíciles de entender, entonces el último, dejó a Carter sintiéndose completamente confundido.

"Todos los días después de la cena, todos tienen que ir a la universidad de Karl para recibir capacitación cultural".

"Su Alteza... ¿Qué significa el entrenamiento cultural? ¿Tienen que aprender a leer y escribir?

-Espero que sí, pero el tiempo es demasiado corto. Karl sólo les puede enseñar unas palabras y números simples. Esta parte, voy a explicar personalmente a Karl. Sólo tienes que enviarlos.

"Pero, ¿por qué quieres hacer esto? Aprender a leer y escribir no será útil para luchar contra las bestias demoníacas! "



"¿Quién dijo eso?" Roland tuvo que bostezar, "Una buena unidad también debe ser bien educado. Esta es una lección aprendida de la historia."

Release that Witch - Capítulos

Capítulo 25: Milicia

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